La jornada de oración de hoy 14 de Mayo
El CELAM exhorta a los Obispos del continente a invocar a Dios para que inspire a la ciencia para que muy pronto encuentre la cura para el COVID-19, a fin de restablecer la salud y el desarrollo, de tal forma, “que juntos construyamos una civilización más humana y fraterna”. Así se lee en la nota de prensa del Celam.
El Santo Padre durante la oración del Regina Coeli, apelando al gran valor universal de la oración acogió la propuesta del Alto Comité para la Fraternidad Humana, de realizar el 14 de mayo una jornada de oración, ayuno y obras de caridad, implorando al Padre y Señor de la Vida «ayude a la humanidad a superar la pandemia del coronavirus» (Papa Francisco, Regina Cæli, Ciudad del Vaticano, mayo 3 de 2020).
El CELAM haciendo eco de la invitación del Santo Padre, pide a todos los Obispos de América Latina y El Caribe, a unirnos en este clamor global por la humanidad. Como bien lo ha dicho el Papa Francisco: «Nos dimos cuenta de que estábamos en la misma barca, todos frágiles y desorientados; pero, al mismo tiempo, importantes y necesarios, todos llamados a remar juntos, todos necesitados de confortarnos mutuamente» (Papa Francisco, Bendición Extraordinaria Urbi et Orbi, Ciudad del Vaticano, marzo 27 de 2020).
Invoquemos al Dios Creador inspire a la ciencia para que pronto se encuentre la cura a este mal, a fin de restablecer la salud y el desarrollo, de tal forma, que juntos construyamos una civilización más humana y fraterna. Concluye la nota de prensa del Celam, encomendando a quienes están sufriendo la inclemencia del COVID -19, la intercesión de la Bienaventurada Virgen María, Madre y Emperatriz de América Latina, Nuestra Señora de Guadalupe.
Día Internacional del enfermero
Y ayer, 12 de mayo, día internacional de la enfermería, fecha en que recordamos el natalicio de Florence Nightingale, enfermera que, en la guerra de Crimea, acudió a tantos soldados heridos y después pidió que en los hospitales se dieran grandes reformas higiénicas.
El presidente del Celam, Mons. Miguel Cabrejos envió una nota dirigiéndose a cada uno de los enfermeros y enfermeras del mundo entero y especialmente a los de América Latina y El Caribe, que “muchas veces están trabajando sin los instrumentos necesarios, poniendo en riesgos sus vidas y las de sus familias, sobretodo en este momento de la pandemia que atravesamos”.
“A ustedes les toca velar por lo más sagrado, el don de la vida, cuidar de ella no sólo para que la persona recupere su salud, sino también trabajando en la prevención; siguiendo el ejemplo de Jesús que curó a muchos enfermos y dijo: “lo que hicieron con uno de estos mis hermanos, conmigo lo hicieron” (Mt 25, 40). Ustedes son hombres y mujeres que también tienen fragilidades y sufren enfermedades, pero, cuando reciben el alivio y el consuelo de Cristo, están llamados a convertirse en descanso y consuelo para los hermanos, con actitud mansa y humilde, a imitación del Maestro. (Cf Ángelus 06-07-2014, Francisco)”.
Por último, el presidente del Celam, agradece a los enfermeros y enfermeras por la noble labor que desempeñan y, que en su día y siempre el “Señor los bendiga y María, salud de los enfermos los proteja”.
Fuente Vatican News