Medjugorje. Mensaje extraordinario de la Virgen al vidente Ivan, viernes, 4 de octubre de 2019
.“Incluso hoy Nuestra Señora vino a nosotros muy alegre y feliz. Nos saludó a todos con su saludo maternal: “¡Alabado sea Jesús, mis queridos hijos!” Luego se volvió hacia todos nosotros con estas palabras:
“Queridos hijos, también hoy los llamo de manera especial a la renovación de la oración familiar. Oren, queridos hijos, y crezcan en santidad. Para que tu santidad sea completa, ¡ora! Deja la transitoriedad del mundo, porque te aleja del amor de mi Hijo. Él te ama, y con ese amor te guío hacia él. ¡Ora, sé perseverante en la oración! ¡Saben, queridos hijos, que cuando atraviesan los momentos más difíciles para ustedes, estoy con ustedes, estoy cerca de ustedes! Gracias, queridos hijos, por haber respondido a mi llamado hoy “.
La Madonna luego oró por un período de tiempo aquí por todos nosotros, ella oró en particular por ustedes, los enfermos presentes. Luego nos bendijo con su bendición maternal y bendijo todo lo que trajiste por su bendición. Los he recomendado a todos: sus necesidades, sus intenciones, sus familias y especialmente a los enfermos. Luego la Virgen continuó orando por nosotros por un período de tiempo y en esta oración se fue, en señal de luz y de la cruz, con el saludo: “¡Vayan en paz, queridos hijos!” ».
IVAN DRAGICEVIC
Nació en Bijakovici el 25 de mayo de 1965. Casado con Laureen Murphy el 23 de octubre de 1994 en Boston, EEUU. Tienen cuatro hijos.
La familia vive mitad del año en Medjugorje y la otra mitad en Boston.
Afirma que la Virgen se le aparece todos los días. Su misión es orar por los sacerdotes y los jóvenes.
Mientras esperamos conocer las palabras de la Virgen, leímos el mensaje de agosto a Ivan
Mensaje Extraordinario de la Virgen María del 14 de agosto de 2009
Vigilia de la Asunción Medjugorie
Más de 15 personas en la Colina de las Apariciones
Relación del Vidente Iván al concluir la Aparición
Esta noche la Virgen vino muy contenta y feliz. Vino con tres ángeles. Al inicio saludo a todos con su maternal saludo: “Alabado sea Jesús, queridos hijos míos”. Después la Virgen rezó de una manera especial por todos los enfermos presentes con las manos extendidas, y bendijo a todos con su bendición maternal, así como a todos los objetos religiosos. Rezó por todos con sus manos extendidas con gran, gran alegría. Luego he encomendado a la Virgen las intenciones de todos y finalmente dio este mensaje:
“Queridos hijos, también hoy, en mi gran alegría, deseo invitaros en este tiempo de gracia: abríos al Espíritu Santo, este es un tiempo de gracia. Queridos hijos, que un río de amor brote de vuestros corazones. Oren, oren, queridos hijos junto a la Madre. Gracias, queridos hijos, porque hoy también habéis respondido a mi llamada”