Martirologio Romano: Fiesta de san Juan, apóstol y evangelista, hijo de Zebedeo, que junto con su hermano Santiago y con Pedro fue testigo de la transfiguración y de la pasión del Señor, y al pie de la cruz recibió de Él a María como madre. En su evangelio y en otros escritos se muestra como teólogo, habiendo contemplado la gloria del Verbo encarnado y anunciando lo que vio. († s.I)
LEA TAMBIÉN: Coronavirus: una poderosa oración a san Roque para pedir por una pronta cura
(Fuente es.catholic.net) Juan, hijo de Zebedeo y de Salomé, hermano de Santiago, fue capaz de plasmar con exquisitas imágenes literarias los sublimes pensamientos de Dios. Hombre de elevación espiritual, se lo considera el águila que se alza hacia las vertiginosas alturas del misterio trinitario: “En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba en Dios, y el Verbo era Dios”.
Es de los íntimos de Jesús y le está cerca en las horas más solemnes de su vida. Está junto a él en la última Cena, durante el proceso y, único entre los apóstoles, asiste a su muerte al lado de la Virgen. Pero contrariamente a cuanto pueden hacer pensar las representaciones del arte, Juan no era un hombre fantasioso y delicado, y bastaría el apodo que puso el Maestro a él y a su hermano Santiago -”hijos del trueno”- para demostrarnos un temperamento vivaz e impulsivo, ajeno a compromisos y dudas, hasta parecer intolerante.
En el Evangelio él se presenta a sí mismo como “el discípulo a quien Jesús amaba”. Aunque no podemos indagar sobre el secreto de esta inefable amistad, podemos adivinar una cierta analogía entre el alma del “hijo del trueno” y la del “Hijo del hombre”, que vino a la tierra a traer no sólo la paz sino también el fuego. Después de la resurrección, Juan parmanecerá largo tiempo junto a Pedro. Pablo, en la carta a los Gálatas, habla de Pedro, Santiago y Juan “como las columnas” de la Iglesia.
En el Apocalipsis Juan dice que fue perseguido y relegado a la isla de Patmos por la “palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.” Según una tradición, Juan vivió en Éfeso en compañía de la Virgen, y bajo Domiciano fue echado en una caldera de aceite hirviendo, de la que salió ileso, pero con la gloria de haber dado también él su “testimonio”. Después del destierro en Patmos, regresó definitivamente a Éfeso en donde exhortaba infatigablemente a los fieles al amor fraterno, como resulta de las tres epístolas contenidas en el Nuevo Testamento. Murió de avanzada edad en Éfeso, durante el imperio de Trajano, hacia el año 98.
Mi amadísimo Santo, San Juan Apóstol, mírame arrodillada a tus pies, suplicándote con todo el afecto de mi corazón para concederme tu protección especial, particularmente cuando se está en peligro de ofender a Dios.
Oh mi querido y santo abogado, me recuerdan ante el trono de la Santísima Trinidad, y obtener para mí de la infinita bondad de Dios, las virtudes de la humildad, la pureza, la obediencia, y la gracia de cumplir exactamente los deberes de mi estado.
Oh mi querido Santo, San Juan Apóstol, Renuevo al Señor, a través de ti, las santas resoluciones que he hecho frecuentemente de intentar amarlo y servirlo fielmente.
Estoy resuelto a desprenderme de todas las cosas terrenales, y deseo ardientemente unirme a Él, como mi primer comienzo, mi último fin y mi bien soberano.
Mi querido Santo, te ruego que ofrezcas a la Santísima Trinidad el sacrificio de todo mi ser, particularmente de mi juicio y voluntad, para conformarse plenamente al Dios santísimo, porque no deseo nada más que su gracia y su santo amor.
Por favor atiende mis suplicas e intercede por nosotros ante Nuestro señor Jesús.
Confió en tu querido San Juan Evangelista. Amen.
La oración a San José del Papa Francisco El Santo Padre propone implorar a San…
Padre Ammar Yako - Sacerdote casi muere dos veces (Fuente es.churchpop.com) El 7 de marzo,…
Oración al Arcángel San Gabriel para pedir un milagro Bendito ser de luz, embajador de…
El Papa Francisco in Iraq: programa del viaje apostólico VIERNES 5 DE MARZO: ROMA -…
Papa Francisco - Audiencia General, 3 de Marzo de 2021 (Fuente Vatican News) En la…
Hermosas oraciones para recitar a San José CONSAGRACIÓN A SAN JOSÉ ANTE LAS TRIBULACIONES ¡Oíd,…